miércoles, 13 de febrero de 2013



Aprendí que la mejor forma de que no te rompan el corazón es fingir que no tienes. Que la mejor forma de no caer, es no ilusionarse con altas expectativas. Que la mejor forma de no sufrir, es no creer que algo es para siempre, que nadie se va a interponer, que el camino va a ser facil, y que todo va a salir perfecto, como esperabas. Tienes que fingir que nada importa, y lo mas importante, demostrártelo a ti mismo.

lunes, 11 de febrero de 2013

No, no te atrevas. No lograrás cambiar mis pensamientos, no voy a dejar que domines mi mente como estás acostumbrada a hacerlo. No soy la misma que en un principio conociste, cambié. No, ni lo intentes. No vas a convencerme de tus lamentos que ni siquiera son ciertos, aprendí a diferenciar la amistad del capricho, conceptos que tenes totalmente confusos. No voy a volver a caer. ¿ Sabes por qué? Sí, porque cambié. No sé si para bien, no sé si para mal, pero mi manera de ver las cosas cambiaron después de conocerte. Quizás, porque cuando uno conoce a una persona y logra quererla de una manera semejante, se aferra tanto a ella que queda ciega, pero no ciega porque no ve, ciega porque no ve lo que no quiere ver. No quise ver que yo era tu juguete, que cuando lo querías lo tomabas, te aburrías, lo dejabas, y te divertías con uno nuevo, pero cuando no había más juguetes con los que jugar, había que recurrir a los viejos, y ese era mi lugar. Como no quedaba otra opción, recurrías a mí, sabiendo que yo siempre iba a estar disponible para divertirte. ¿Pero sabes qué pasó? Un día ese juguete se cayó del estante donde lo habías dejado y cuando quisiste volver a recurrir a él, ya no estaba. En ese preciso instante fue cuando te diste cuenta de lo que significaba ese juguete para vos, y que por no apreciarlo cuando lo tenías, se te había escapado de las manos. Intentaste reemplazarlo, pero te diste cuenta de que era absurdo, no tenía reemplazo. Lo perdiste . Ya no hay lugar para el perdón, . Y ahora vas a pasar por todo lo que yo pasé. Y aunque a mi me mate el orgullo, . Y aunque mi corazón ya no tenga remedio pude liberarme de esa ceguera que nunca me dejó ver la realidad, como dicen, NO HAY MAL QUE POR BIEN NO VENGA.
A veces necesito creer que las personas son buenas aunque me decepcionen una y otra vez...
Tumblr_m86msunwt01rud1uqo1_400_large